Nunca se me hubiera ocurrido tomar el salmón hervido, sí, simplemente hervido. Pero desde que una amiga, muy buena cocinera por cierto,  nos invitó a cenar y lo sirvió de esta forma, calentito y acompañado de mayonesa, así de simple, y estaba tan bueno…lo hago así con frecuencia.

Como el salmón es bastante graso suelta esa grasa y queda muy suave, nada seco.

El salmón se puede tomar a la plancha, marinado, ahumado, en tartar…pues recomiendo probarlo hervido y también os gustará.

Qué necesitamos:

• Lomos de salmón fresco
• Una hoja de laurel
• Sal
• Agua
• Mayonesa
• Huevas de lumpo

Cómo se hace:

Ponemos agua a hervir con sal y una hoja de laurel. Cuando empiece a hervir echamos el salmón y lo sacamos cuando vuelva a hervir de nuevo, como las gambas.

Lo escurrimos y lo colocamos en la bandeja o plato que vayamos a usar. Hacemos mayonesa y servimos el salmón con la misma, adornando con huevas de lumpo y perejil picado.

Si no os gusta la mayonesa o estáis a régimen lo acompañamos con verdurita o ensalada, espolvoreado con perejil por encima.