Moussaka, Mousaka, musaca…de estas y más formas he visto escrita esta palabra. Todas se refieren al famoso plato griego hecho con berenjenas y carne de cordero básicamente. El original suele llevar las berenjenas en rodajas y con piel, y la carne, como he dicho, es de cordero.
Yo he hecho mi propia versión, y se la dedico al pueblo griego que tan mal lo está pasando. Es una musaca casera, sencilla de hacer, con ingredientes fáciles de encontrar y nada caros.No se puede hacer un plato con coste alto en homenaje a un pueblo, el griego, que en estos momentos tiene pocos euros en los bolsillos.
Qué necesitamos:
- Dos berenjenas
- Medio kilo de carne picada
- Un vaso o taza de tomate frito
- Cuatro dientes de ajo
- Medio vasito de vino
- Harina de trigo
- Mantequilla o margarina
- Leche
- Sal
- Aceite de oliva (muy mediterráneo)
- Queso rallado
Cómo la hacemos:
En primer lugar pelamos las berenjenas y las cortamos en trocitos. En una sartén freímos los ajos pelados y cortados, y a continuación hacemos lo mismo con la berenjena.Echamos un poco de agua y vino y las dejamos cocer hasta que estén tiernas. Las sacamos y aplastamos con un tenedor.
Ya tenemos una capa preparada.
En la misma u otra sartén refreímos la carne con ajito picado , salamos y añadimos el tomate frito. Lo mezclamos bien.
Ya tenemos otra capa.
En una fuente de horno de paredes altas vamos poniendo capas de berenjena y carne con tomate, una sobre otra.
En mi caso la capa inferior era de carne, encima una de berenjena y por último otra de carne.
Hacemos una bechamel, como ya he explicado en otras recetas, y cubrimos toda la superficie con ella. Echamos un poco de queso rallado y la metemos en el horno precalentado a 180º.
Cando esté la superficie más o menos dorada la sacamos y…lista para comer.
Tengo que decir que en mi casa gustó muchísimo, tanto que ya me están preguntando cuándo voy a hacerla de nuevo.