¿Qué les parece la idea de merendar unas sanísimas tostadas untadas con crema de cacao pero sin la preocupación ni el remordimiento de ingerir demasiada azúcar? Aprovecharemos los muchos beneficios del cacao, como su aporte en fibra y minerales (magnesio, fósforo y potasio), y evitaremos las grasas saturadas, los azúcares refinados, y los lácteos de las cremas de cacao industriales. Endulzaremos nuestra crema de cacao con stevia y los azúcares naturales de la harina de algarroba.

También es una merienda saludable para los niños ya que, por su contenido en hidratos de carbono y en ácidos grasos, el cacao es una fuente de energía que, entre otros beneficios, ayudará a regular la temperatura corporal, a envolver y proteger órganos vitales como el corazón y los riñones, y a transportar las vitaminas liposolubles (A, D, E, K) facilitando así su absorción. La grasa resulta imprescindible para la formación de determinadas hormonas y suministra ácidos grasos esenciales que el organismo no puede sintetizar y que ha de obtener necesariamente de la alimentación diaria.

Por su contenido en calcio, el cacao contribuye al fortalecimiento de huesos, dientes y encías, y favorece la adecuada coagulación de la sangre, previniendo enfermedades cardiovasculares, ya que el calcio ayuda a disminuir los niveles de colesterol en sangre. Constituye también una fuente natural de vitamina B2 (riboflavina), lo que favorece la actividad oxigenadora intercelular, mejorando el estado de las células del sistema nervioso y colaborando en la regeneración de tejidos como piel, cabello, uñas y mucosas, y de forma especial en la integridad de la córnea, contribuyendo de esta manera a mejorar la salud visual. Esta vitamina interviene además en la transformación de los alimentos en energía, y complementa a la vitamina E en su actividad antioxidante, y a las vitaminas B3 y B6 en la producción de glóbulos rojos, ayudando a mantener el sistema inmune en buen estado*.

Los ingredientes…

• 3 cucharadas de hojas secas de stevia.
• 4 cucharadas de cacao puro en polvo desgrasado sin azúcares añadidos.
• 8 cucharadas de harina de algarroba.
• 200 ml de leche de avena ecológica sin azúcares añadidos.
• 75 gramos de avellanas tostadas sin sal.
• 5 cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE)
• Rebanadas de pan integral multicereales.

El menaje…

• Una picadora eléctrica.
• Un bol mediano.
• Una espátula de silicona.
• Una olla pequeña.
• Un vaso de vidrio.
• Un tarro de vidrio con tapa.

Manos a la obra…

Pondremos la leche de avena en un vaso e introduciremos las 3 cucharadas de hojas secas de stevia. Herviremos agua en una olla pequeña y, cuando esté en ebullición, introduciremos el vaso de leche de avena con stevia. Dejaremos cocinar (al baño María) 5 minutos el conjunto. Después, colaremos la leche y reservaremos.

Introduciremos en la picadora los 75 gr. de avellanas. Las picaremos hasta obtener polvo de avellanas y reservaremos.

Por otro lado, en un bol mediano, introduciremos 4 cucharadas soperas de cacao puro en polvo desgrasado sin azúcares añadidos y 8 cucharadas soperas de harina de algarroba de cultivo ecológico. Agregaremos la avellana en polvo y mezclaremos el conjunto con una espátula de silicona.

Volveremos a introducir la mezcla del bol en la picadora e incorporaremos la leche de avena endulzada de stevia y picaremos a baja velocidad. Luego, incorporaremos al conjunto 4 cucharadas de AOVE.

Sacaremos la crema resultante de la picadora con una espátula de silicona y la introduciremos en un tarro de vidrio con tapa para almacenar en la nevera.

Tan solo nos faltará tostar las rebanadas de pan integral y untarlas con nuestra sanísima crema de cacao.

Mmmmmmmm… ¡Qué merienda!

*Fuente: http://www.saludybuenosalimentos.es/alimentos/index.php?s1=Frutas&s2=Tropicales&s3=Cacao