James y la magdalena de melocotón gigante :)

9 Ene

Imagen

 

Cuando James se metió dentro del melocotón que creció desmesuradamente en su jardín, no se podía ni imaginar las aventuras que viviría. Francamente, no creo que comiendo estas magdalenas de melocotón se vivan demasiadas aventuras pero si es que haciéndolas pasas un buen rato en la cocina, que al fin y al cabo, era lo que pretendía cuando ayer por la tarde me puse a hacerlas antes de ir a ver el partido.

Depende de vuestros moldes os saldrán más o menos, a mi me salieron mil, porque los Reyes Magos estos que tengo como hermana me regalaron una máquina para hacer mini-cupcakes que salen muy monos, no lo niego, pero de bocado 🙂

Para hacer las magdalenas estas necesitamos:

  • 240 gr de melocotón en almíbar.
  • 90 gr de harina integral.
  • 210 gr de harina blanca de trigo (yo usé harina normal de bizcochos)
  • 2 cucharaditas de levadura en polvo.
  • ½ cucharadita de bicarbonato sódico.
  • 2 cucharaditas de canela en polvo.
  • 1 huevo.
  • 140 gr de azúcar moreno.
  • 80 ml de aceite.
  • 45 gr de azúcar blanco.
  • 65 gr de mantequilla “en punto de pomada” (:))
  • 200 gr de azúcar glas

Pues al lío.

 240 gr de melocotón son más o menos 4 trozos de los que vienen en lata (de hecho la lata es de 240 gr). Uno de los trozos lo partimos en daditos y el resto lo troceamos bien. (Todo ello sin el almíbar)

Imagen

 En un bol mezclamos la harina integral con 140gr. de la blanca, además de la levadura, el bicarbonato sódico y una de las cucharaditas de canela. 

Imagen

En otro bol, batimos el huevo y le echamos el azúcar moreno, el aceite… (que yo siempre frío primero con una cascará de naranja para que no sepa luego demasiado a aceite crudo)

Imagen

 

…y el melocotón troceado. Luego mezclamos la mezcla con los ingredientes secos hasta formar una masa tal y como la de la foto.

Imagen

 

En otro bol vamos a poner el resto de la harina y de la canela, el azúcar blanco y la mantequilla. En teoría se tiene que formar una masa parecida a la otra pero en blanco…MENTIRA!! No sale, así que yo le eché un chorrín de leche y me quedé más ancha que otro poco.

Imagen

En la maquinita esta que me regalo la mi hermana, pintamos un poco de aceite cada pocillo, porque aunque las instrucciones digan que son antiadherentes…no me fío mucho, de hecho…alguno que otro se me fastidió al sacarlos.

Imagen

Ponemos un poco de masa de la oscura y encima un poco de la blanca, cerramos y que cuezan unos 5-7 minutos, si se hacen en el horno, ya tendréis moldes más grandes y tardarán unos 25 minutos a 180ºC.

Imagen

Imagen

Los vais sacando y haciendo más con toda la masa (en el caso de que tengáis maquinita, sino al horno de una sentada, por suerte para vosotros).

Imagen

Los dejáis enfriar y mientras tanto hacéis una especie de glaseado para poner por encima. El glaseado este es el azúcar glas con un chorrín de agua hasta conseguir algo así…

Imagen

Ponéis un trocín de melocotón del que habíais dejado antes reservado y por encima un poco de glaseado. Y colorín colorado, esta receta, se ha acabado.

Imagen

 

Imagen

Que aproveche 🙂

(Haciendo esta receta ha sido inevitable no acordarme del monólogo de Ángel Martín de «El melocotón que murió por culpa tuya».)

Deja un comentario