Caldo Casero de la Abuela Feliciana

Caldo Casero de la Abuela Feliciana, descubre cómo se hace el auténtico caldo casero con esta receta recuperada.

Este Caldo casero de la Abuela Feliciana tiene su historia, ya que esta mujer fue una de las grandes emprendedoras del siglo pasado.

Yo la conocí ya entrada en años por lazos familiares, siempre moderna ella que daba gusto verla lo guapa que iba, sin adornos de más y con esa elegancia que sale de dentro.

Las circunstancias hicieron que enviudara muy joven, con tres hijos pequeños a su cargo y eso no la amilanó ni se refugió a llorar con la familia, tomó el toro por los cuernos, como se suele decir y con lo poco que tenía ahorrado después de la guerra, montó una pequeña carnicería en su pueblo, ya que había aprendido estas lides de su esposo.

Pasados los años y tras prosperar y los hijos crecer la vendió un poco a su pesar, para trasladarse a Logroño donde vivía el resto de su familia, sus ya nueve maravillosos nietos a los que echaba de menos en el pueblo.

Siempre con un buen consejo sin dar la chapa, como se decía entonces, cocinera de excepción ya que daba gusto ir a comer a su casa, querida por todos y añorada siempre.

La receta de su Caldo Casero no la he visto en ninguna otra casa, nutritiva, sana y rica a partes iguales.

Si vais a hacer una Sopa de Pollo de la Abuela con el caldo, primero hacer la sopa con la pasta o el arroz que más os guste, las yemas de huevo hay que añadirlas justo antes de servir, ya que si lo ponéis a hervir, se cuajan y no quedan bien.

Sé que ahora estáis acostumbrados a tirar de caldo de brick  y listo, pero la verdad no tienen nada que ver con un caldo casero de verdad y menos con este de la Abuela Feliciana, si lo pruebas verás la diferencia.

No digo que algunos caldos envasados sean malos, pero otros son prácticamente agua con color, es la pura verdad, lee las etiquetas, es lo que siempre recomiendo yo cuando voy a comprar.

Los Caldos Caseros los podéis guardar perfectamente congelados, en el frigorífico bien cerrados en un tarro de cristal os pueden duran entre 4 y 5  días en condiciones óptimas.

Tanto si haces una Sopa de Pollo con Verduras, como si haces un caldo de pescado para un arroz por ejemplo, te servirá igualmente para una sopa o cualquier otra receta que tengas que hacer, siendo natural y saludable para tu familia.

Los caldos y sopas caseros son muy recomendables para niños a partir de 1 año, así como en personas mayores, por su alto contenido en proteínas y vitaminas, así como su aporte de agua que hidrata el cuerpo tan necesario en estas edades.

En este caldo casero de la Abuela Feliciana, hemos integrado todos los buenos ingredientes de las verduras y las carnes necesarias, así como el toque principal de su terminación, los huevos, que es la clave para que os quede de lujo total.

Vamos con la receta de este Caldo Casero de Abuela.

Ingredientes:

300 gr. carne de ternera morcillo a ser posible que contiene gelatina.

1/4 de pollo o gallina.

1 punta de jamón serrano 120 gr. aproximadamente.

2 huesos de ternera blancos que aportan calcio.

1 trozo de jarrete de cerdo, tiene mucha gelatina, vital para las articulaciones.

2 puerros grandes.

2 zanahorias.

1 nabo mediano.

1 rama de apio.

2 patatas medianas.

1/2 pimiento rojo.

1/2 pimiento verde.

1 tomate fresco entero.

1 ramas de perejil fresco.

1 Bouquet Garni  opcional (romero, tomillo, laurel, pimienta negra entera)

sal al gusto.

4 l.  de agua.

2 yemas de huevo a temperatura ambiente.

Cómo hacer un Caldo Casero.

Lavamos las verduras, cortamos en trozos no demasiado grandes, así soltarán más sabor, las patatas y el tomate los dejamos enteros, así los podemos quitar con menos dificultad y se deshacen menos.

Ponemos en la olla o cazuela las carnes, la ternera, el pollo o gallina, los huesos de ternera lavados para que no quede ninguna esquirla después de cortados, la punta de jamón y el jarrete de cerdo.

Cubrimos con el agua, poniendo a hervir a fuego medio.

Veremos que empiezan a subir las impurezas de la carne y las verduras, como una espuma marrón, con una cuchara o rasera la vamos quitando hasta que este el caldo sin esta espuma.

Dejamos que hierva a fuego lento durante 2 horas y media a 3 horas en olla normal.

Si lo hacemos en olla expres en 1 hora es suficiente para tener un caldo casero bien concentrado.

Una vez que está hecho, retirar el exceso de grasa, para que quedé un caldo casero limpio y sano, colamos las verduras y retiramos las carnes.

Calentar e incorporar la sal, ya que el jamón le habrá dado su punto, es el momento de saber cómo está el punto de sal.

Sin que llegue a hervir, sólo caliente ya que si no se cuajan las yemas de huevo, poned en un recipiente las dos yemas sin la clara.

Incorporar un poco de caldo a las yemas y mezclar.

Pasar las yemas ya mezcladas con el caldo por un colador para que no quede nada de clara e incorporarlas al resto del caldo casero de la Abuela, le aportará todas las proteínas del huevo dándole a nuestro caldo una textura y sabor inigualables.

Tenéis la Receta también en Vídeo para que sea más fácil de hacer.

Dale al PLAY

Estos trucos de las abuelas nunca fallan, la verdad, cuando lo probé estaba realmente exquisito.

Hace unos días me preguntaron que como limpiaba las cazuelas y las ollas cuando tienen mucha grasa después de hacer un guiso o caldo como este, que se quedaba pegada la grasa a los bordes.

Es muy sencillo, antes de ponerte a frotar como una loc@  echa desengrasante en spray por la cazuela, deja unos minutos y pasa el chorro del agua muy caliente, saldrá toda la grasa prácticamente sola.

Listo nuestro Caldo Casero de la Abuela Feliciana, un primer plato caliente que revive a un muerto como se suele decir.

Lo he acompañado de un pan de centeno para hacer barquitos, tú lo puedes acompañar de lo que más te guste!

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