Para hacer esta receta necesitamos pimientos verdes de freír que tengan un tamaño mediano,más bien pequeñitos, y con forma regular, no sirven los cuernocabra, por ejemplo.

Es muy sencilla de hacer y una manera original de comer pimientos fritos y tortilla de patata, dos platos muy nuestros y riquísimos.

Qué necesitamos:

• Dos huevos
• Dos patatas
• Cinco o seis pimientos verdes de freír
• Aceite de oliva
• Sal

Cómo se hacen:

En primer lugar hacemos una tortilla de patatas jugosa, que no quede muy cuajada pues al freír los pimientos rellenos terminará de hacerse.

Cortamos el rabo y la parte superior a los pimientos y quitamos las pepitas. Reservamos los rabitos.

Con la tortilla rellenamos los pimientos huecos,empujando para que el relleno llegue a la punta más estrecha. Procuraremos que no quede muy al filo del hueco para que al freírlos no se salga la tortilla.

En una sartén con aceite de oliva freímos los pimientos dándoles la vuelta para que se frían por todos los lados. Freímos también los «sombreritos». Los escurrimos y tapamos con estos.

Nos los podemos tomar así, calentitos y enteros. O podemos dejar que se enfríen y cortarlos en rodajas.

Para cortarlos en rodajas mejor que estén fríos pues se cortan mejor, y luego las calentamos en el microondas.